Alessandro Baricco (Turín, 25 de enero de 1958) es un escritor italiano que transforma las palabras en bellezas. Entre sus tantos libros hay uno maravilloso: Seda. Una novela corta en extensión, larga en intensidad, que se desarrolla en el siglo XIX y que trata de una historia de amor de un comercienta de Occidente que se traslada a Oriente en busca de gusanos de seda para su industria textil.
Roger Federer (Basilea, 8 de agosto de 1981) es un tenista suizo que transforma el tenis en belleza. Sus tiros de revés asemejan a un bailarín ofreciendo una flor. Acaba de ganar, a los 35 años, su 19° título de Gran Slam y su octavo en Wimbledon (sin ceder un set).
Baricco escribió sobre Federer. Y la mezcla de ambos no falla: es belleza. Aquí tienen el texto. Disfruten 
Brillante. Cuando tipos como Baricco se dan estos gustos es un placer para todos porque ellos ven lo que otros no vemos y lo saben contar. Otro ejemplo, Norman Mailer viendo Ali- Foreman en el 74. Muy bueno, Jorge.
Que lástima que Alessandro no haya estado 31 años atrás en el estadio Azteca, cuando Maradona le hizo un gol a la minuciosa mesura Británica.
Fue el primero; con la mano y el árbitro lo convalidó.
Recuerdo un viejo documental de Diego sobre el desequilibrio pasional que desató en Nápoles. Conversaban los periodistas con un anciano que, sentado en la plazoleta de un bar, se tomo un tiempo para definir al Diez.
Dijo el noventón; días atrás dormitaba al sol acompañado solo por mi vaso de grappa. Sin aviso, entró Dios. Se sentó y con cierta aspereza, me dio un par de recomendaciones para cerrar con una orden; ¡que nadie tocara mi bebida!.
Minutos más tarde entro Diego. Se sentó en la silla que ocupara Dios, me sonrió y dijo “hola Giuseppe” para, sin tiempo a nada y con la mano izquierda, beberse la grappa de un trago.
Ese es Diego.
Y su mágica conducta para desconstruir el orden y la pretensión Británica de disciplinar hasta el último fragmento de realidad.
Como decimos en un conocido Bolg de Rugby; «por las dudas me pongo el casco».
Tremendo, el único punto donde no coincido (me atrevo a cuestionar un texto im-pe-ca-ble!!!) es en la definición sobre Su Majestad Michael Jordan, el resto es una obra de arte!!! Saludos George y que te vaya de 100.000 con este blog!!!